miércoles, 21 de mayo de 2008
Natan Ionatan / Memoria de la arena
No olvidará la arena las infinitas olas
pero ya nadie guarda recuerdo de la espuma
excepto aquellos que partieron
en el tardío viento de la noche:
nunca se borrará de sus memorias.
Algo temblaba, pálido, a orillas de sus almas.
En la arena grabaron lo que la luna,
subitamente, iluminó:
un rostro extraño y, claudicante, la risa.
Todo, menos la espuma blanca, volverá a los abismos.
Mueren las luminarias de la noche. La amistad, el amor,
la juventud que alcanza - de pronto - su final.
Quedan allí conchas vacías
cantando sus lamentos por el mar
y un cementerio en las colinas;
años que en el silencio transcurrieron
entre los sicomoros y las espadañas y las tumbas.
Traducción: Gerardo Lewin
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1 comentario:
Mueren las luminarias de la noche. La amistad, el amor,
la juventud que sorpresivamente alcanza su final.
qué versos!
me gusta este poema. besos Gerard!
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